Avalancha
No sé decir la verdad sin que la voz me tiemble a mitad de discurso como si lo que estuviese a punto de decir fuese una avalancha que va a arrasar con todo y con todos,
por eso la escribo.
Pero a tí te la digo porque cuando te escribo tiemblo igual,
y cuando me miras no hay avalancha que pueda conmigo.
Comentarios
Publicar un comentario